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miércoles, 24 de octubre de 2012

Jénifer

Me pierdo en tú mirada limpia y clara
me invade la nostalgia del ayer
cuando en mis brazos te dormías
al arrullo de mi voz.
Tú risa me envuelve 
en un espacio superior,
nada es más bello
que tú alegría de vivir.
Cuando te enfadas
y no encuentro la llave
para entrar en ti,
me doy cuenta de lo 
cerca que suenan
tus pasos alejándose.
Esa flor que un día nació
de mi tierra fértil
pronto sacará 
los pies del tiesto
y echará raíces
en otro lugar.
Cuando te sientas sola
piensa en mi,
y vendré a dormirte
al arrullo de mi voz. 


2 comentarios:

  1. La talla de tu poesía agranda todo lo que toca; en este caso algo tan grande y con tanta profundidad temporal como indican estos versos. Me han encantado.

    Mil abrazos.

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  2. Gracias Clochard,me ruboriza que alguien como tú,que escribes tan bien valore así lo que escribo.Son puros sentimientos de madre...Un abrazo fuerte!!

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